SU CASTILLO


Después de dos años de rehabilitación, el próximo viernes abre sus puertas al público el castillo de Belmonte, del siglo XV.

Los trabajos de reforma han sacado a la luz el artesonado y los estucos del siglo XIX, perdidos entre el polvo y la suciedad que reinaba antes de su restauración.

Horario Visitas (a partir del 16 de julio):
MAÑANA: de 10:00 a 13:30
TARDE: de 16:00 a 19:30
PRECIOS
Adultos: 6 euros / Niños: 4 euros


Ahora falta la segunda fase, en la que se invertirán 1.5 millones de euros y que se centrará sobre todo en el exterior.

En esta fase se plantea la restauración arquitectónica y revitalización del conjunto amurallado interior (liza) y exterior (barbacana), junto con trabajos de restauración de estancias interiores en gabinetes de la planta segunda. El grueso de la actuación es relativo a obras de restauración, recuperación, consolidación y conservación de los muros de la fortificación.

Antes de abrir sus puertas ya han sido varias las productoras nacionales e internacionales las que se han interesado en utilizar esta fortaleza que mandó construir Juan Pacheco (Marqués de Villena) para ser el escenario de largometrajes y anuncios publicitarios, según adelantó su alcaldesa, Angustias Alcázar, quien destacó que volverá a convertirse en el mejor reclamo turístico para esta localidad.

El origen del castillo de Belmonte data del siglo XII, aunque el castillo actual es del siglo XV, iniciándose su construcción en 1456. Con la guerra por el trono, fue plaza dominada por Felipe V el Animoso.

ABC / CUENCA
Día 12/07/2010

SU GASTRONOMIA

Cuenca, gastronomía rural y pastoril.
La gastronomía de Cuenca es muy tradicional y recocida por su carácter rural y pastoril. Al pensar en la cocina de la provincia de Cuenca trae a la mente platos hechos por pastores, por arrieros, por cazadores, hombres que hacen frente a través de la energía proporcionada por la comida a un clima duro, en el cual se pasa del calor al frío casi sin hacer escalas y en una región que brinda muchos productos para que sean utilizados. Las comidas, son adaptadas al clima por lo que se adecuan a cada estación.
Vale mencionar que la calidad de las materias primas y el respeto a las tradiciones, son dos características esenciales de esta provincia. Se utiliza mucho la carne de caza, que generalmente es encabezada por la perdiz, aunque se puede emplear carne de gallina en su lugar.
La cocina de la provincia de Cuenca nos trae a la mente platos hechos por pastores, por arrieros, por cazadores, hombres que hacen frente a través de la energía proporcionada por la comida a un clima duro, donde se pasa del calor al frío casi sin hacer escalas y en una región que brinda muchos productos para que sean utilizados.
La calidad de las materias primas y el respeto a las tradiciones, son dos características esenciales de esta provincia. La carne de caza, encabezada por la perdiz, se encuentra presente en multitud de platos, como el morteruelo, aunque se puede emplear carne de gallina en su lugar.
Otras carnes, como el cordero, presente en casi toda La Mancha, también encuentran su lugar en tierras conquenses. Recetas como los zarajos, o las chuletas de lechal al rescoldo de la sierra, son muy interesantes, sabrosas, e ideales para degustar todo el sabor de esta carne. Platos tradicionales como el Ajoarriero, elaborado con bacalao y ajos (excelentes los de Las Pedroñeras).
Los originales gazpachos galianos sobre pan ácimo, los morteruelos, variadas carnes de caza, las migas, las calderetas, complementan esta cocina basada en la carne y añaden sabores diferentes, pero igual de populares.
El protagonismo de la carne, desaparece de los fogones conquenses con la llegada de las fiestas de Semana Santa. Los potajes, las garbanzadas con bacalao y espinacas, las judías blancas o las patatas al Ajovirón, asumen el estrellato, dando un giro a la gastronomía tradicional.
Las verduras, cocidas en agua y sal, dan un toque de sencillez en el que, sin embargo sorprenden los sabores naturales.
Las truchas, de ríos y arroyos conquenses, frescas y sabrosas, también adquieren protagonismo en las mesas con la llegada de esta época.
La oferta dulcera de la provincia de Cuenca es amplia y muy variada. Destaca el alajú, un dulce elaborado con miel , almendras y miga de pan, aunque también hay veriones que sustituyen la almendra por nueces o higos, aunque el alajú original se elabora con almendras, los bizcochos de canela, las obleas, el pan de pasas o las rosquillas fritas.
También son dignas de mención las torrijas empapadas en leche (sobre todo en las citadas fiestas de Semana Santa), las rosquillas fritas, los bizcochos de canela, las obleas, el pan de pasas o las rosquillas fritas.
En esta provincia se produce vino de Denominación de Origen La Mancha, blancos y tintos son muy interesantes y, recientemente, ligeros y afrutados, cuando son jóvenes. Además puede encontrarse un licor típico, muy interesante, ideal para facilitar digestiones pesadas: el resolí. No deje de probarlo si visita Cuenca.

SUS COSTUMBRES


SU SELLO



Sello emitido en noviembre de 1967
( serie Castillos de España)

SUS CALLES Y RINCONES







SUS ARTISTAS

Obra de Carlos Martínez Bricio


Obra de Sixto Cañavate Romero

Obra de Francisco J. Guerra.

Obra de Pilar Poveda


Agustín Zafra López. Poeta de Belmonte

"De igual forma que nuestra fuente del Pilar, (y digo nuestra porque es de todos) la fuente del Pilar de Belmonte (Cuenca), nace recibiendo las aguas de los meandros de la Gotera, y que llegando al vado subterráneo en forma de cazuela natural esta se llena, y al llenarse ésta se rebosa y vertiendo sus aguas alrededor, otra vez el agua busca la corriente de su arroyo, y por el suelo árido que aunque se resiste va dejado paso al agua, que oculta por callejas va abriéndose paso hasta aprovechar el desnivel del suelo donde el agua sale a la luz.
Así es como afloran los manantiales de agua natural saliendo por su propio peso sin ser empujada por nadie sino que gozosa el agua busca la luz del sol, y sale porque la naturaleza es generosa dando un servicio a los lugareños del pueblo para que abreven sus rebaños de ganados, siendo también un gozo para el caminante que llega con sed y le gusta beber el agua fresca y enriquecida por los diferente estratos que en su paso el agua ha ido cogiendo, esta agua aunque salobre es centenaria y jamás ha estado contaminada".

SUS OBRAS

NOTA DE PRENSA
Fomento financia 37 proyectos con cargo al 1% Cultural por un importe de casi 25 M€
En esta legislatura Fomento ha financiado 278 actuaciones con cargo a los fondos del 1% cultural por valor de casi 160 M€.
Madrid, 4 de diciembre de 2007 (Ministerio de Fomento).
El Ministerio de Fomento firmó hoy un total de 37 convenios para subvencionar actuaciones con cargo al 1% Cultural por un importe de casi 25 millones de euros. La suscripción de los acuerdos con los representantes de las diferentes Administraciones y Organismos corrió a cargo de la Ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y la Subsecretaria de Fomento, Encarnación Vivanco. Los fondos del 1% cultural se constituyen con el 1 % de la inversión en obra pública del Ministerio de Fomento. Previo a la firma de los convenios, los proyectos a subvencionar se deciden en la Comisión Mixta formada por los Ministerios de Fomento y de Cultura, en base al IV Acuerdo de Colaboración entre ambos Departamentos, para la actuación conjunta en el Patrimonio Histórico Español a través del 1% cultural. 160 millones de euros durante la presente legislatura.

En las tres reuniones celebradas por la Comisión durante 2007 se han aprobado un total de 76 actuaciones, que van a suponer una aportación del Ministerio de Fomento de 27,45 millones de euros en este ejercicio y de otros 26,38 millones durante los tres próximos años.

Con ellas, son en total 278 las actuaciones las que el Ministerio de Fomento ha financiado a lo largo de esta legislatura. Lo que ha supuesto destinar, por parte de Fomento, un total de casi 160 (158,95) millones de euros, con cargo a los fondos del 1% cultural.
Estas cifras representan un fuerte incremento, tanto en número de actuaciones financiadas (un 56% más) como en importes de subvenciones tramitadas (el 92% más), en relación con lo ejecutado a lo largo de toda la legislatura anterior.
Nota: se adjunta cuadro anexo con el listado de proyectos suscritos hoy, entre ellos figuran tres solicitados por la Consejería de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón. La Ministra de Fomento ha procedido a la firma de los mismos que fueron suscritos ayer por la Consejera, Eva Almunia, al no poder asistir hoy al acto previsto.
Firma convenios 1% Cultural 4-12-2007
Rehabilitación interior - Fase I- del Castillo de Belmonte.Cuenca.
El Ayuntamiento de Belmonte1.176.513,68 €
Esta información puede ser usada en parte o en su integridad sin necesidad de citar fuentes.
OFICINA DE INFORMACIÓN MINISTERIO DE FOMENTO

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, presentó hoy en Belmonte (Cuenca) el proyecto de `Ventas de la Ruta de Don Quijote¿, una iniciativa con la que el Gobierno regional se propone impulsar la industria hostelera ligada al corredor ecoturístico y cultural que recrea las aventuras de Don Quijote y su fiel escudero.

Durante el acto, al que también asistió la consejera de Economía y presidenta de la Empresa Pública Don Quijote de la Mancha, María Luisa Araújo, el presidente regional presentó el proyecto de la primera venta de la Ruta de Don Quijote que se ubicará en el antiguo Palacio del Infante Don Juan Manuel en Belmonte, informó la Junta.
El emplazamiento de las ventas irá asociado a los pueblos y aparcamientos, descansaderos repartidos a lo largo de los 2. 500 kilómetros de la Ruta que reúnan, entre otras condiciones, la de ser un lugar emblemático quijotesco, disponer de un valor histórico, artístico de importancia, estar ubicadas en lugares con alto interés medioambiental, tener buena conexión con la red de carreteras, así como tener gran potencial para atender la demanda turística.El diseño y la construcción de las ventas será el de alojamientos hoteleros de alto nivel, con 40 habitaciones, servicios, spa y previsión de las infraestructuras necesarias para el desarrollo de actividades deportivas, como equitación, cicloturismo, visitas guiadas o senderismo.

En concreto, serán construcciones de una o dos plantas en torno a un patio principal: patio de armas o corral, siguiendo, además, las premisas de las casas típicas manchegas. Su función principal será la de dar alojamiento y comida a aquellos caminantes que lo necesiten en la Ruta de Don Quijote, adaptándose a las necesidades familiares de cada usuario.Raíces popularesPara la realización de estas ventas se procurará tener en cuenta las raíces populares de la arquitectura y sistemas de construcción tradicionales manchegos, con el fin de integrar estas construcciones en el patrimonio histórico de cada lugar, informó la Junta.

La Red Básica de Ventas de la Ruta de Don Quijote será financiada íntegramente por el Gobierno de Castilla-La Mancha y su puesta en explotación será en régimen de concesión a largo plazo a través de empresas hoteleras. Este proyecto también tiene por objetivo servir de acicate a los empresarios para que, una vez constatada su viabilidad, promuevan la construcción de ventas de iniciativa privada, siguiendo los cánones y protocolos de calidad establecidos en la red básica.

El Palacio del Infante Don Juan Manuel albergará esta infraestructura que contará con más de 3. 660 metros cuadrados de superficie.El Palacio fue fundado por el Infante de Castilla, don Juan Manuel, al obtener el Señorío de Belmonte. Posiblemente éste sea el edificio más antiguo de la villa del que partían dos murallas de piedra de yeso que circundaban al pueblo.Más tarde pasó a ser posesión de don Juan Pacheco, primer marqués de Villena que construyó el actual castillo en 1456, dejando el Palacio para convento de religiosas.

Posteriormente, se realizaron diversas obras de adaptación y ampliación, destacando su magnífico claustro atribuido al arquitecto Esteban Jamete, que actualmente está parcialmente consolidado por la labor desarrollada por la escuela-taller municipal.
En 1960, las monjas abandonaron el convento, entre otras causas por el incipiente estado de ruina del edificio. Con el paso del tiempo y el robo de elementos constructivos el deterioro del Palacio ha sido imparable.

El Palacio fue adquirido en 1972 por el estado mediante donación del Ayuntamiento de Belmonte con la finalidad de construir un Parador Nacional de Turismo. Al no culminarse tal finalidad el Gobierno de Castilla-La Mancha retoma la idea inicial para construir la primera Venta de la Ruta de Don Quijote.

La entidad pública Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha (Gicaman) adjudicó a JOCA Ingeniería y Construcciones, empresa perteneciente al grupo Katry, la construcción de 'La venta del Infante don Juan Manuel', situada en la localidad conquense de Belmonte, por un valor de 6,7 millones de euros.
Esta infraestructura, con un periodo de ejecución de 24 meses, será la primera venta turística de la famosa Ruta de Don Quijote en su tramo primero, que transcurre entre Toledo y San Clemente, y pasa por El Toboso y Belmonte, en Cuenca, según informó en nota de prensa el Grupo Katry.
JOCA levantará el inmueble en el antiguo Palacio del Infante Don Manuel, monumento de gran valor patrimonial, que se rehabilitará y recuperará como alojamiento hotelero de alto nivel, con cerca de 40 habitaciones, spa y previsión de otras infraestructuras complementarias para el desarrollo de actividades deportivas y culturales.

Esta construcción contará con más de 3.660 metros cuadrados de superficie. La actuación más importante será la de restablecer las fábricas originales, con técnicas similares a las empleadas antiguamente, reponiendo el apoyo de los muros.
Para esta labor, JOCA contempla el uso de mampuestos calizos de análoga procedencia a los existentes.

El proyecto es una iniciativa de la Junta de Castilla-La Mancha, que a través de Gicaman, ha decidido poner en marcha medidas para promover y dinamizar la industria turística ligada a la Ruta de Don Quijote mediante la creación de una Red de Ventas.

Un taller de empleo compuesto por mujeres ha rehabilitado cuatro molinos tradicionales de Belmonte.
La consejera de Trabajo y Empleo, Magdalena Valerio, ha recorrido las localidades conquenses de Belmonte y Mota del Cuervo en las cuales ha visitado diversas iniciativas de formación y empleo que se desarrollan mediante subvenciones del Servicio Público de Empleo de Castilla-La Mancha.


MOLINO SIMILAR
En Belmonte ha clausurado un Taller de Empleo compuesto exclusivamente por mujeres que comenzó en diciembre de 2005. El Taller de Empleo 'Molinos de Viento I' ha estado compuesto por 16 alumnas y ha impartido las especialidades de albañilería y carpintería. Durante su desarrollo han rehabilitado, en la parte práctica de su aprendizaje, cuatro molinos tradicionales de gran valor histórico y patrimonial que jalonan el entorno del famoso castillo de la localidad.

La participación tan decidida de las mujeres de Belmonte en este Taller de Empleo ha sido resaltada por la consejera de Trabajo y Empleo, Magdalena Valerio, que se ha dirigido a ellas durante la entrega de diplomas valorando el esfuerzo realizado y animando a los empresarios de la zona para que 'contraten a estas mujeres que están perfectamente formadas en oficios con presente y futuro en Cuenca y en Castilla-La Mancha'.Magdalena Valerio ha recordado que 'junto con el diploma acreditativo de vuestros conocimientos profesionales, se os entrega un Aval Empleo que supone una subvención para el empresario que decida contrataros de 4.800 euros'. Valerio ha dicho a las mujeres que han participado en el programa de formación y empleo a que 'si los empresarios no se deciden a contrataros, porque todavía algunos no han superado ciertas barreras culturales, os animo a crear vuestra propia empresa, para ello contareis siempre con el apoyo del gobierno regional'.
El Taller de Empleo de Belmonte cuenta con una subvención de Trabajo y Empleo de 292.668 euros. La consejera de Trabajo y Empleo ha destacado como 'estos programas mixtos que combinan la formación con el trabajo efectivo cumplen un objetivo fundamental que es el de colaborar a la inserción laboral de sus participantes, y el nivel de inserción es elevado llegando al 85 por ciento. Pero además también consiguen que se recupere el patrimonio de nuestros pueblos, un patrimonio valioso y abundante en mucho lugares de Castilla-La Mancha en general y de Belmonte en particular'Magdalena Valerio acompañada de la alcaldesa de Belmonte, Mª Angustias Alcázar, ha visitado, momentos antes de la clausura del taller, los molinos de viento objeto de la restauración, comprobando junto con alumnas y monitores el importante trabajo realizado.
La consejera se ha desplazado después hasta la localidad de Mota del Cuervo (Cuenca) para conocer el desarrollo de la Escuela Taller 'Balcón de la Mancha', compuesta por 14 jóvenes, en la que se imparten las especialidades de forja y carpintería. El objetivo de esta Escuela Taller es formar a sus participantes en un oficio de manera que una vez concluida la formación puedan incorporarse al mercado laboral.
Las actividades prácticas de los alumnos participantes se van a centrar en la restauración y recuperación del Parque de los Molinos de Viento de Mota del Cuervo. En el proyecto se incluye la restauración de seis molinos en el conocido como Balcón de la Mancha.
El Servicio Público de Empleo aporta una subvención de 152.939 euros en este programa de formación y empleo. Una cantidad que, en palabras de la consejera, 'es una magnifica inversión porque se inicia con ella un camino que proporciona, en un alto porcentaje de casos, una salida profesional para estos jóvenes que han abandonado por razones muy diversas sus estudios y pueden, aprendiendo un oficio, labrarse un futuro profesional'. En este sentido, Valerio ha recordado que el Gobierno regional destina 28 millones de euros a los programas mixtos de formación y están distribuidos por toda Castilla-La Mancha, para llegar a 3.500 desempleados.
Más de diez obras en estos años ha realizado el Ayto., destacando obras como la rehabilitación del nuevo ayuntamiento y el asfaltado y adoquinado de varias calles en el casco antiguo e histórico, como por ejemplo la famosa Cuesta del Cerrillo ( C/Alonso Castillo)

SUS CAMPOS




LOS VINOS DE BELMONTE

La Cooperativa San Isidro Labrador Soc. Coop. de C-LM, de Belmonte (Cuenca), se fundo en el año 1945 por un grupo de agricultores, que con el tiempo fue creciendo hasta lo que es hoy en día.

La Bodega está equipada con tres prensas neumáticas desde hace 15 años, y tres autovaciantes de 1.000 Hl. y 3 depósitos de acero inoxidable de 1.200 Hl., se colocaron hace cinco años, también hay 2 depósitos de chapa de 11.000 Hl., y la bodega tiene tinajas con una capacidad para 32.000 Hl. Todo ello esta enfocado para conseguir una mayor calidad en la elaboración de vinos.

Se elaboran las variedades airen y cencibel, próximamente con la reestructuración se elaborará alguna variedad mejorante.

Se elaboran entre 35.000 y 40.000 H.l de vino blanco airen y unos 2.000 Hl de cencibel actualmente.La filosofía de la bodega es conseguir vinos de calidad para vender embotellado, de esta manera ya se ha instalado una pequeña embotelladora para comenzar en el difícil mundo de la comercialización del vino.

Variedades: Airén, Tempranillo.

Marcas Comerciales: - Visibel y Castibell.

SU HISTORIA

Historia de matrimonios, Pachecos y Mendozas.
El señorío de Belmonte en Cuenca, base territorial del marquesado de Villena, fue creado con parte de los territorios del alfoz de Alarcón. El señorío sobre la villa de Belmonte fue concedido por Juan I de Castilla a Juan Fernández Pacheco, cuyo nieto sería el primer marqués de Villena. Enrique IV, biznieto de Juan I concedió el marquesado de Villena en el año 1461 a Juan Pacheco, III señor de Belmonte. El territorio de Belmonte se amplia a lo largo del siglo XV como recompensa a la fidelidad que los Pacheco mantendrán a Juan II, nieto de Juan I. Como recompensa a don Juan Fernández Pacheco, III señor de Belmonte, por la defensa que hace en la batalla de Olmedo de los intereses de Juan II y de Álvaro de Luna; válido del rey y condestable de Castilla, el monarca le nombra marqués de Villena en el año 1445.

En este punto es necesario mencionar la situación de la Corte castellana a lo largo del siglo XV considerándola como el escenario en el que se desarrolla un apasionante entramado político y social de lucha por el poder y que culmina con la guerra civil que da paso a una nueva etapa en la historia de España.

Recordemos que el que será Juan II hereda el trono en el año 1406 a la muerte de su padre, Enrique III “el Doliente”, con sólo un año de edad. Durante la minoría del futuro monarca el gobierno de Castilla estuvo en manos de su tío Fernando de Antequera quien en 1412 fue elegido rey de Aragón trás el Compromiso de Caspe al ser nieto por vía materna del rey aragonés Pedro IV “el Ceremonioso”. La regencia de Fernando de Antequera sirvió para que sus hijos, uno de los cuales será el siguiente rey de Aragón con el nombre de Juan II, como su homónimo y primo de Castilla, se aliaran con la alta nobleza castellana para controlar el gobierno de Castilla. En 1419, el príncipe Juan a los catorce años empieza su reinado y la pequeña nobleza y los burgueses, encabezados por Álvaro de Luna, le ayudan a expulsar de Castilla a los Infantes de Aragón y a someter a los nobles que en Castilla les apoyan. Recordar que Juan II de Aragón es padre de Fernando “el Católico” por lo que él y su mujer la princesa Isabel son primos segundos como biznietos ambos de Juan I de Castilla.

En el año 1445 la batalla de Olmedo que tiene lugar en los alrededores de esta vallisoletana dirime el enfrentamiento entre el rey Juan II y los levantiscos nobles castellanos contando el monarca con el apoyo de algunas de las casas nobles más poderosas de Castilla, la pequeña nobleza y la burguesía. Por este apoyo Juan Fernández Pacheco, III señor de Belmonte, recibe en 1445 el título de marqués de Villena, Alicante, el de conde de Xiquena, Murcia, en 1460 y en 1472 el de duque de Escalona, Toledo, siendo el principal apoyo del futuro rey de Castilla Enrique IV, aunque para conseguir esto no le importe traicionar a don Álvaro de Luna del, su aliado y mentor y del que fue paje, hasta consentir su procesamiento y muerte en la horca que tiene lugar en Valladolid el 2 de junio de 1453.
El señor de Belmonte y Enrique IV mueren ambos en el año 1474. Era el señor de Belmonte seis años mayor que su rey y treinta años menor que el Condestble. No sólo los intereses políticos unen al señor de Belmonte y al Condestable sino que también Álvaro de Luna para reforzar su alianza política casa al Pacheco en 1435 con su prima hermana Juana de Luna. Este matrimonio es anulado en 1442 aduciendo el señor de Villena el haber sido contraído cuando apenas contaba quince años. También en 1442, Juan Pacheco contrajo segundas nupcias con María de Portocarrero, VI señora de Moguer y de Villanueva del Fresno, hija de don Pedro Portocarrero y de doña Beatriz Enríquez. Ésta es hija de Alonso Enríquez, almirante de Castilla y señor de Medina de Rioseco en Valladolid y de Juana de Mendoza que es tía del primer marqués de Santillana señor de la Casa de Mendoza. Pero, ¿qué mejor manera de continuar asegurando la alianza política que con la relación familiar? Así María de Portocarrero es sobrina de la que fue segunda mujer del Condestable de nombre Elvira Portocarrero que había muerto antes de 1431 sin dejar descendencia, siendo este año cuando en el Condestable contrae su tercer y último enlace con Juana Pimentel que es prima hermana de Elvira Portocarrero por ser ambas nietas de Juana de Mendoza por vía materna. El señor de Belmonte y María Portocarrrero fueron padres de diecisiete hijos. El señor de Belmonte fue también padre de dos hijos naturales.

Juan Fernández Pacheco casa por tercera vez y de nuevo con una Mendoza prima en cuarto grado de su segunda mujer como es María Fernández de Velasco y Mendoza, primera duquesa de Roa e hija del que es ahora Condestable de Castilla, Pedro Fernández de Velasco y primer conde de Haro en La Rioja. María es prima hermana del II duque del Infantado por su madre siendo su padre primo en tercer grado del II Infantado al ser el Condestable de Castilla biznieto de la muy nombrada Juana de Mendoza que es tía abuela del I duque del Infantado.

A este respecto deberíamos añadir que los Mendoza a diferencia de los Pacheco en la lucha sucesoria por el trono de Castilla apoyarán a la princesa Isabel lo que permitirá su engrandecimiento, mientras que la Casa de Villena verá por su apoyo a la princesa Juana muy limitado su poder y su prestigio en el reinado de los Reyes Católicos, aunque el primer marqués de Villena estaba ligado a los Mendoza por su matrimonio con una nieta de Juana de Mendoza. Pero durante el reinado de Juan II y de su hijo Enrique IV de poco valían las relaciones familiares ante el deseo de mantener la propia situación política en el tramado de intereses nobiliarios que rodeaban las figuras de estos monarcas.
El título de duque del Infantado refrendado por Isabel al hijo de Iñigo López de Mendoza, Diego Hurtado de Mendoza segundo marqués de Santillana, es la recompensa al apoyo que la Casa de Mendoza le está dando en la lucha que mantiene contra su sobrina Juana. Ya en 1475 Enrique IV había nombrado duque del Infantado a Diego Hurtado de Mendoza para mantener el apoyo de la familia Mendoza a su hija y a la Corona iniciado en la batalla de Olmedo, título que en 1476 reafirma la futura reina Isabel. Después de lo dicho podríamos añadir que la Casa de Mendoza supo jugar mejor su poder y su influencia en estos años de crisis en Castilla y estar siempre en el bando ganador en tanto que los Villena jugaron peor sus cartas apoyando a Juana, la hija de Enrique IV, en vez de apoyar a Isabel, su hermanastra, en la guerra por la Corona que tuvo lugar entre los años 1475 y 1479. A lo acabado de recoger añadir que la Casa de Villena para no quedar aislada frente al nuevo poder que significaban los Reyes Católicos y en busca de alianzas que hicieran olvidar su pasado jugará nuevas cartas y buscará alianzas matrimoniales que la coloquen al lado de los vencedores como eran entre otros, los Mendoza.
Así, el I marqués de Villena casará a su hija Francisca Pacheco con su primo en cuarto grado el II conde de Tendilla; el Gran Tendilla, y primer marqués de Mondejar que es nieto del primer marqués de Santillana y así primo hermano del II duque del Infantado. Nos encontramos con que el segundo Infantado está casado con una hija del Condestable y de su tercera mujer Juana Pimentel y que es hijo del primer titular y su primera mujer Brianda de Luna y Mendoza siendo Brianda hija de una prima hermana del Condestable. Así, el segundo titular del Infantado casa con una prima segunda de su madre siendo ésta prima hermana del Condestable que casa con el que fuera mayordomo real de Juan II y cuyo puesto ocupa Álvaro de Luna como favorito del monarca. María Pacheco hija al igual que Francisca del primer marques de Villena casa con su primo segundo Rodrigo Alonso Pimentel IV conde y I duque de Benavente y su hija María Pimentel lo hace con el III duque del Infantado que es así hijo de un primo hermano del marido de Francisca. Las abuelas de María y Rodrigo son hermanas e hijas de Juana de Mendoza. Recordar lo ya dicho acerca de Juana Pimentel que como recordamos fue la tercera y última mujer del Condestable es tía del citado IV conde y I duque de Benavente siendo además Juana y el III conde de Benavente nietos de la igualmente ya citada Juana de Mendoza por lo que la segunda mujer del primer marqués de Villena y la tercera de don Álvaro de Luna son primas hermanas y miembros de la Casa de Mendoza como nietas de Juana de Mendoza. Estos matrimonios refuerzan lo dicho sobre el mundo de intereses en los que se mueven los nobles de la corte castellana del siglo XV en la que las alianzas matrimoniales son una carta más del complicado juego que se desarrolla en el que los vínculos familiares no evitan las venganzas políticas como ocurre en el caso de Pacheco y el Condestable.

Pero no solamente se establecen estas alianzas familiares ente los Mendoza y los Pacheco sino que los Pacheco se acercan a la Corona cuando el tercer marqués de Villena, Diego López Pacheco, casa con la tercera marquesa de Moya, Luisa de Cabrera, nieta de la que fuera gran amiga de la reina Isabel y de su mismo nombre Isabel de Bobadilla. Isabel de Bobadilla y su marido Andrés de Cabrera serán los primeros marqueses de Moya.
La alianza entre Moya y Villena era muy interesante para el marqués de Villena pues la Casa de Moya estaba emparentada con la familia Mendoza pues la que será tercera marquesa consorte de Villena es nieta del I duque del Infantado y prima hermana del tercer titular del Infantado. Unir a ello que la prima del III Villena la ya mencionada María Pimentel casa precisamente con el III duque del Infantado. No podía Villena conseguir mejores apoyos en la Corte que los del Infantado es así que los cuartos titulares de Villena y Infantado son por su pertenencia a la Casa de Mendoza primos segundos. Los marqueses de Villena tenían gran interés en las tierras del marquesado de Moya ya que en el año 1451 Juan II dio Moya a Juan Fernández Pacheco contra el que se resistieron los moyanos con éxito pasando la villa a la Corona.
En 1463, Enrique IV hizo donación del señorío de Moya a don Andrés de Cabrera, "el buen vasallo", su mayordomo real. También entonces se opusieron los moyanos. Esta decisión de la reina no agrado demasiado a los moyanos pues Moya siempre estuvo de parte de Isabel en el proceso sucesorio y no vieron bien que fuera recompensado su apoyo a Isabel enviando la villa al poder señorial confirmando un señorío dado por Enrique IV a un noble de su corte sobre un territorio fiel a Isabel, aunque Andrés Cabrera fuera el esposo de su gran amiga y confidente.
El señorío de Moya se convertirá en marquesado en el año 1480 al terminar la guerra civil en Castilla. Parece que Isabel en su testamento se arrepintió de la decisión de separar a los moyanos de la Corona. El primogénito de este matrimonio es el segundo marqués de Moya y su hija la tercera titular, su segundo hijo, Fernando, será el primer conde de Chinchón y su hermana Isabel de Cabrera y Bobadilla casa con el I marqués de Cañete en Cuenca y tambien Mendoza.

Para dar un adecuado final a esta complicada trama familiar y a tono cono lo expuesto decir que el II marqués de Villena había casado en primeras nupcias en 1469 con su prima segunda Juana de Luna que no es otra que la nieta de Álvaro de Luna y su tercera mujer Juana Pimentel. Juana de Luna es hija de Juan de Luna heredero del Condestable. A este respecto ver que la madre del II marqués de Villena y la madre de su mujer son primas hermanas. Juana de Luna y Diego Fernández Pacheco son padres de Juan Pacheco de Luna. No olvidemos que ya Juan Fernández Pacheco, padre de Diego, casó en primeras nupcias con una prima hermana del Condestable.
Juan Fernández Pacheco, III señor de Belmonte, se convertirá en el valido de Enrique IV de Castilla, hijo de Juan II, y en su principal apoyo nobiliario una vez eliminado el condestable don Álvaro de Luna. La fidelidad del Marqués y su falta de prejuicios a la hora de mantenerse en el cargo y con ello mantener al propio Enrique IV en el trono le supone aumentar su poder económico lo que se concreta en los nuevos títulos nobiliarios que recibe como son el de conde de Xiquena en 1461 y el de duque de Escalona en 1472.
El apoyo político a los intereses del rey Enrique IV en la trama sucesoria al trono de Castilla se concreta al convertirse la Casa de Villena en la principal defensora de los derechos dinásticos de la princesa Juana cuando se oponga a su tía, la futura reina Isabel la Católica, en la guerra civil que se vive en el reino a finales del siglo XV. Desde el año 1445 era Juan Pacheco el primer marqués de Villena. Las posesiones del marquesado de Villena en la provincia de Cuenca alcanzan una importancia fundamental cuando don Juan de Pacheco consiga de Enrique IV ser nombrado maestre de la orden de Santiago y con ello acceder a las grandes riquezas de esta orden militar. El apoyo a los intereses de la princesa Juana supondrá una importante pérdida de posesiones y de influencia para la Casa de Villena cuando Isabel gane en la guerra civil que la enfrenta a su sobrina.
Los Reyes Católicos arrebataron al segundo marqués de Villena, Diego López Pacheco, sus posesiones, le obligaron a jurarles fidelidad e incorporaron la villa de Belmonte a la Corona declarándola villa independiente. Igualmente le desposeyeron del título de marqués de Villena, aunque los sucesivos duques de escalona lo seguirán utilizando.

Juan Fernández Pacheco, Rico-hombre de Castilla, era III señor de Belmonte, y fue nombrado I marqués de Villena (12.7.1445), I duque de Escalona (17.12.1472) y I conde de Xiquena (1460). Fue Camarero mayor del príncipe de Asturias, hijo del rey Juan II de Castilla. En 1440, obtuvo la Trinchantía y cuchillo de mesa del mismo príncipe. Desde el 11.3.1440 fue consejero del rey Juan II. Desde el 22.9.1441fue Alcaide de Segovia.
Desde el 12.4.1440 fue Camarero mayor de la Cámara de los Paños. Desde el 2.10.1441 fue Camarero mayor del Rey. Desde el 10.1.1442, fue Mayordomo mayor del príncipe Enrique. Desde el 17.8.1440 fue alcaide de Logroño. Desde el 15.8.1448 fue Adelantado Mayor de Castilla. Desde el 22.6.1451 al 20.1.1456 fue Mayordomo mayor del rey Enrique IV de Castilla. Desde el 24.10.1454 fue Mariscal de Castilla. Desde el 6.4.1458 fue caballero de la orden de Santiago (previa dispensa del Papa por estar casado, Bulla 15.11.1453). Fue elegido treinta y nueve Maestre de la Orden en Ocaña el 19 de Julio de 1467. También caballero de la orden aragonesa de La Jarra desde el 20 de noviembre de 1449. Nació en Belmonte en 1419 y muere en Trujillo el 1 de octubre de 1474.

Era Juan Fernández Pacheco hijo de Alfonso Téllez Girón, señor de El Frechoso en Portugal; hijo del I conde de Valencia de Campos-ahora de don Juan en León- por su segundo matrimonio con la titular del señorío y nieta de Pedro I de Portugal que había casado en primeras nupcias con Teresa Téllez Girón señora de El Frechoso y hermano de Lope Vázquez de Acuña que emparenta a este linaje portugués con el importante linaje conquense de los Albornoz, y de María Pacheco II señora de la villa de Belmonte y su tierra; hija única y heredera de Juan Fernández Pacheco IX señor de Ferreira de Aves, Penela, Celorico y Olivença en Portugal.
Guarda mayor del rey Juan I de Portugal, alcalde-mayor de Santarém y primer señor de Belmonte en Castilla, y de Inés Téllez de Meneses de ascendencia también portuguesa. Los padres del que será primer marques de Villena a pesar de la disparidad de sus apellidos son primos hermanos, el padre nieto de Violante López Pacheco y la madre nieta de Diego López Pacheco VIII señor de Ferreira de Aves, ambos hijos de VII señor de Ferreira de Aves. Decir de Diego López Pacheco que fue en 1355 uno de los asesinos de Inés de Castro amante de Pedro I de Portugal y a la que conocemos como “la reina que reino después de morir”.
Después del asesinato se refugia en Ciudad Rodrigo, luego pasa a Aragón y después a Francia. Regresa a su vejez a PortugalLos antepasados de los Pacheco proceden de Portugal y son descendientes de Fernán Ruiz Pacheco; siendo Pacheco un mote, señor de Ferreira en Portugal, que vivió a mediados del siglo XIII. Un nieto de Fernán Ruiz, Lope Fernández Pacheco séptimo señor de Ferreira, ya está al servicio del futuro rey castellano Pedro I. y su primogénito, Diego López Pacheco, al servicio de Enrique II.
Juan Fernández Pacheco, primogénito de Diego López Pacheco, recibe en el año 1398 de Enrique III el título de primer señor de Belmonte y el segundo, Lope Fernández Pacheco, el de señor en Salamanca de Cerralbo en 1379 de manos de Enrique II convirtiéndose el señorío en marquesado en el año 1533.
Juan Fernández Pacheco casa en primeras nupcias en Toledo el 27 de septiembre de 1435 (disuelto el 13 de febrero de 1442) con Juana de Luna, hija natural de Fray Rodrigo de Luna, Gran Castellán de Amposta de la orden de San Juan, con Ángela Sériala.Contrae un segundo matrimonio en 1442 con María Portocarrero, VI señora de la villa de Moguer, señora de Villanueva del Fresno, testó 1471. Hija y heredera de Pedro Portocarrero V señor de la villa de Moguer, IV señor de Villanueva del Fresno, alcalde mayor de Sevilla, jefe, cabeza y pariente mayor de toda la casa de Portocarrero en Portugal y Castilla, y de Beatriz Enríquez, hija mayor de Alfonso Enríquez, I señor de Medina de Río Seco, Almirante de Castilla, sobrino de Enrique II; hijo de su gemelo Fadrique, y de Juana de Mendoza.Casa en terceras nupcias con María de Velasco, I duquesa de la villa de Roa; que casa una vez viuda con Beltrán de la Cueva I duque de Alburquerque, conde de Ledesma, Maestre de santiago que muere el 31 de diciembre de 1492 y que sucedió en el valimiento de Castilla durante el reinado de Enrique IV a don Álvaro de Luna y al propio marqués de Villena hasta el punto de considerar a la princesa Juana hija suya.
María Es la hija tres de Pedro Fernández de Velasco II conde de Haro, Condestable de Castilla, camarero mayor del rey Enrique IV, y de Mencía de Mendoza, hermana del I duque del Infantado. Padres de Mencia Pacheco que casa con Diego de Cárdenas I duque de Maqueda en Toeldo.
El Ducado de Valencia de Campos fue creado en 1387 a favor de don Juan de Portugal, hijo del Rey don Pedro y de doña Inés de Castro. Don Juan se casó primero en 1377 con doña María Téllez de Meneses, hermana de la reina Leonor de Portugal, y por segunda vez 1378 con doña Constanza de Castilla, hija bastarda de Enrique II. de Castilla. A la muerte de este Duque, su hija y su yerno fueron Condes de Valencia, llamada después de don Juan. Antes señorío del infante Juan de Castilla que muere en 1319 y es hijo de Alfonso X” el Sabio”

Diego López Pacheco hijo de Juan Fernández Pacheco y María de Portocarrero es II marqués de Villena por cesión, ocurrida en Arévalo el 5 de abril de 1468), II duque de Escalona, II conde de Xiquena, IV señor de la villa de Belmonte y su tierra, III conde consorte de San Esteban de Gormaz y luego quinto titular por derecho, señor consorte titular del Infantado y luego también titular por derecho, mayordomo mayor del rey Enrique IV de Castilla, de su Consejo, mayordomo mayor de los Reyes Católicos desde el año 1480, vasallo del Rey y de la Reina, de sus Consejos, cuarenta maestre de santiago desde septiembre de 1474, capitán general de Andalucía, desde abril de 1490, y de la Frontera de Granada por renuncia de su padre, albacea y testamentario del rey Enrique IV de Castilla.
Muere en Escalona el 26 de noviembre de 1529. Casa en primeras nupcias en 1469 con Juana de Luna, III condesa de San Esteban de Gormaz, señora de la ciudad de Osma y del Infantado, de las villas de Riaza, Maderuelo, Castilnovo, Fresno de Cantespina, Langa, Rejas, Oradero, Alcozar y Barahona; que muere en 1480 siendo sepultada en la catedral de Cuenca, hija única de Juan de Luna, II conde de San Esteban de Gormaz y de Albuquerque; luego señorío y ducado de Beltrán de La Cueva, señor del Infantado y de la ciudad de Osma, de las villas de Ayllón, Maderuelo, Riaza, Fresno de Cantespino, Alcozar, Castilnova, Rejas, Oradero, Ríofrío, Fontanera, Brasa, condestable y notario mayor de Castilla, copero mayor del rey Juan II de Castilla, canciller mayor del Sello, camarero mayor de la Cámara de los Paños, alguacil mayor de Toledo, y de Leonor de Zúñiga, hija mayor de Álvaro de Zúñiga, I duque de Arévalo, Plasencia y Béjar, conde de Ledesma, nieta paterna de Álvaro de Luna, I conde de San Esteban de Gormaz y de Albuquerque, duque de la ciudad de Trujillo, condestable de Castilla, maestre de Santiago y de su tercera mujer Juana Pimentel; hija del II conde de Benavente. Padres de Juan Pacheco de Luna, IV conde de San Esteban de Gormaz, que nace en Belmonte el 24 de abril de 1472 y muere aquí en 1501. Le hereda su padre.
Contrae segundas nupcias con Juana Enríquez, dama de la Reina Católica, hija de Alonso Enríquez, tercer almirante de Castilla, II conde de Melgar de la Frontera y señor de Medina de Río Seco, y de María de Velasco. Juan Enríquez muere en 1530.
La abuela de Juana es prima hermana y ambas descendientes de Juana de Mendoza. Padres de diez hijos. El primogénito Fernando muere antes de 1504 heredando su segundo hijo también de nombre Diego.

El 27 de septiembre de 1435, con quince años de edad, Juan Pacheco, señor de Belmonte y I marqués de Villena así como I conde de Xiquena y I duque de Escalona, se casó en primeras nupcias con doña Juana de Luna, prima hermana de don Álvaro de Luna, Condestable de Castilla y Valido del rey castellano Juan II, e hija legítima de Fray Rodrigo de Luna, Gran Castellán de Amposta y primera dignidad de la Orden de San Juan de Jerusalén en Aragón.
El matrimonio se llevó a cabo por presiones de don Álvaro de Luna sin la voluntad del esposo, Juan Pacheco recurrió varias veces contra la validez del matrimonio, hasta que el 13 de febrero de 1442 el matrimonio quedó anulado por sentencia de don Diego Sánchez de Rivas, Vicario General de la Diócesis de Segovia. En 1442, Juan Pacheco contrajo segundas nupcias con doña María de Portocarrero, señora de Moguer y de Villanueva del Fresno.
Del enlace de don Juan Pacheco con doña María Portocarrero nacieron diecisiete hijos. Los tres hijos varones primeros se encargaron de continuar las ramas más famosas del linaje: Pacheco, Portocarrero y Girón.
Don Juan Pacheco dividió sus estados en éstos tres hijos, instituyendo tres Mayorazgos. De este modo, se dividieron también los apellidos de los tres hermanos, quedando Diego López Pacheco heredero del I Mayorazgo, Pedro Portocarrero heredero del II Mayorazgo y Alonso Téllez Girón con el III Mayorazgo, imponiendo el apellido Téllez Girón en memoria de su abuela paterna doña Teresa Téllez Girón, alternando en la sucesión del Mayorazgo, permutando en la sucesión los nombres de Alonso Téllez Girón con Juan Pacheco. Viudo de doña María de Portocarrero, en 1472, don Juan Pacheco volvió a contraer terceras nupcias, en la Villa de Peñafiel, con doña María de Velasco, hija de don Pedro Fernández de Velasco, II Conde de Haro y VI Condestable de Castilla, y de doña Mencía de Mendoza, hermana del I Duque del Infantado.
Juan Pacheco fundó en Belmonte el Monasterio de San Francisco de la Observancia y el Monasterio de Santa María de El Parral en Segovia, de estilo gótico mudéjar, de la orden de los jerónimos y reposo secular de la familia Pacheco. Don Diego López Pacheco, hijo primogénito de don Juan Pacheco y de doña María Portocarrero, heredero del I Mayorazgo, fue II Duque de Escalona, II Marqués de Villena, Pretenso Maestre de Santiago y Capitán General en la Guerra de Granada. Después de la toma de Granada, los Reyes Católicos por Privilegio Real de 4 de Diciembre de 1491 le hicieron merced de las Villas y Tierras de Serón y Tíjola, cesando en el título de Marqués de Villena que fue absorbido por los Reyes Católicos.
A pesar de las diligencias de don Diego López Pacheco para que el título nobiliario revertiera a la familia, los Reyes Católicos no accedieron a tal restitución. No obstante, los Señores de este linaje continuaron utilizando entre sus títulos el de Marqués de Villena. Don Diego López Pacheco se casó en primeras nupcias, en el reinado de Enrique IV, con doña María de Luna, Condesa de San Esteban de Gormaz e hija de don Álvaro de Luna.
Del matrimonio nació don Juan Pacheco de Luna, III Conde de Santisteban. Al morrir sin sucesión, el Condado de Santisteban quedó incorporado al linaje Pacheco. El Condado de San Esteban de Gormaz quedaba formado por Alcocer, la villa de Ayllón, Baraona, Castilnovo, Fresno de Cantespino, la villa de Maderuelo, la ciudad de Osma, la villa de Riaza, la villa de San Esteban y el Castillo de Garci Muñoz. El segundo matrimonio de don Diego López Pacheco, en el reinado de los Reyes Católicos, fue con doña Juana Enríquez - hija de don Alonso Enríquez, Conde de Melgar y III Almirante de Castilla, y de María de Velasco.
Como merced por el casamiento, los Reyes Católicos les confirmaron el Señorío de Escalona, ratificando el título de Duques de Escalona. Del segundo matrimonio nacieron los hijos: Diego López Pacheco, Isabel Pacheco y Magdalena Pacheco.
El matrimonio don Diego López Pacheco y doña Juana Enríquez fue enterrado en el Monasterio de El Parral de Segovia.

Diego López, II Marqués de Villena, fundó los conventos de la Concepción Francisca de Ayllón y Escalona, gravando a sus sucesores don los gastos del capítulo de la provincia franciscana de Castilla, ostentando el Patronato General de la Orden Franciscana para España. Don Diego López Pacheco, natural de Escalona, fue III Duque de Escalona, pretenso Marqués de Villena, Conde de Santisteban, Señor de Belmonte y su tierra, y Caballero del Toisón de Oro.
Se casó con doña Luisa de Cabrera y Bobadilla, natural de Escalona, tercera Marquesa propietaria de Moya. El matrimonio falleció en 1556, siendo enterrados en el Monasterio de El Parral de Segovia, como todos los antecesores de los Villena.
Agradecemos la información desde:

SUS DETALLES




SU SEMANA SANTA


La Semana Santa de Belmonte es algo sencillo, humilde, austero, de pueblo; pero es algo vivo, sentido, fervoroso, tradicional, de pueblo cristiano.
El Drama de la Pasión se representa en una docena de "pasos" que salen a la calle con sus luces, sus flores, sus bandas de tambores y cornetas, sus cofradías y capuchones; una docena de "pasos" que salen a la calle acompañados de peinetas y mantillas, a la antigua usanza, o de niños que recuerdan con sus atavíos, los personajes de la Pasión y hacen presente la devoción de las familias.


Desfilan pasos tan antiguos como un Calvario Flamenco del s. XV, tan impresionantes como el Cristo de la Columna, obra de Salcillo, y tan devotos y populares como Jesús con la Cruz, San Juan, la Verónica, la Dolorosa o el Cristo de los Peligros, de autores anónimos, pero capaces de despertar clamores de fe o escalofríos de fervor.
Las escenas de la Pasión se admiran también con fervor y entusiasmo dentro de La Colegiata, especialmente en estos días Santos - y hasta de fuera vienen gentes a contemplarlas -. Llegan al medio centenar las esculturas, relieves y lienzos que se conservan en La Colegiata de San Bartolomé‚ capaces de arrancar miradas de emoción y sentimientos de piedad.
Allí aparecen las gubias de Egas Cueman de Bruselas, o de Pedro de Villadiego de Cuenca, o de Salvador Carmona, o de Pascual de Mena; o los pinceles de Luis Morales, "El Divino", o de Esteban Tornero de Belmonte, o de García Salmerón de Cuenca, aunque los más son anónimos pero de rango y belleza suficiente.

La Semana Santa de Belmonte se vive en La Colegiata, donde el espíritu religioso del pueblo palpita en las celebraciones litúrgicas, solemnizadas con los sacerdotes y seminaristas hijos del pueblo.

La piedad se enfervoriza en la participación de la tragedia de los días santos con los cánticos penitenciales, o la lectura de la Pasión, o la mirada en el recuerdo del lavatorio, o en las horas de silencio y recogimiento familiar ante el Monumento, o en el beso emocionado a la Cruz, después de la invitación gregoriana, "mirad el árbol de la Cruz donde llega a su culmen, según quiere el Concilio Vaticano II, cuando llega el momento de "Tomad y comed,esto es mi Cuerpo".
Pero donde el drama revienta de emoción para convertirse en incontenida alegría, es cuando suena el Aleluya... y la voz del Angel que advierte:
"No busquéis entre los muertos al que vive".
Cristo ha Resucitado.

SU CINE

Padres, los que tengáis hijos,hijos que tengáis parientes,
parientes que tengáis primos,primos que tengáis suegras,
mirad qué crimen más feo en la provincia de Cuenca.
Cometieron tres ladrones a eso de las once y media,
con un hacha, dos pistolas,tres sables y una escopeta.
Saltaron por una tapia como si fueran tres fieras,
encuentran primero al amo,lo sacan en camiseta,
y en el corral, con un hacha,le cortan manos y piernas.
Buscaron a la criada,y debajo de la artesa
la encuentran con el criado acostadito con ella.
Entonces el más canalla,sacando un arma tremenda,
se tira sobre la joven,que era andaluza y soltera.
Los otros dos asesinos con el criado se enredan,
y el más viejo por delante y el más joven a la inversa,
me lo ponen de pinchazos lo mismito que una breva,
y no contento con esto,le cogieron la cabeza
y al tenérsela en las manos,se la cascan con dos piedras.
Muerto el amo, muerto el mozo,y la joven medio muerta,
los asesinos sacaron morcillas de la despensa,
y las frieron con vino,luego, con unas tijeras,
destrozaron una sábana,y se llevaron las perras.
A un Santo Cristo que había,le dijeron cosas muy feas,
y el Santo Cristo se calla para descubrir la tragedia.
Quien quiera, por cinco céntimos,tomar la parte primera,
que llego en la segunda parte a dar del suceso cuenta,
donde se ve que el que mata,asesina, roba o quema,
muere a manos del verdugo,como murió Luis Candelas,
como murió Juan Palomo y otros mil de su ralea.
Un error judicial y una confesión falsa, obtenida mediante brutales torturas, hicieron famosa a la provincia de Cuenca a principios de los años 20´. La desaparición de un pastor algo deficiente en el camino de Osa de la Vega a Tresjuncos, en agosto de 1910, despierta las sospechas de los vecinos, y éstas recaen sobre León Sánchez y Gregorio Valero.
Con el convencimiento de que el desaparecido, José María Grimaldos, está muerto, la Guardia Civil busca el cadáver sin resultados, mientras escucha la voz del pueblo, donde los rumores y comentarios sobre los dos sospechosos de asesinato y lo que hicieron a la víctima no cesan. Sin embargo, ante la falta de pruebas de que se haya cometido un crimen, la situación parece calmarse, hasta que un nuevo juez llega a la demarcación y reabre el caso en abril de 1913, ordenando la detención de los sospechosos.
Ahí empieza su calvario.
La lista de atrocidades, desde aislarlos durante días sin comida ni bebida hasta arrancarles las uñas, es brutal y, para librarse del suplicio, los dos confiesan haber matado al pastor, contradiciéndose constantemente y culpándose uno a otro. Cinco años después son condenados y sólo salen de prisión en 1924. Es entonces cuando el presunto muerto reaparece en escena y se descubre que ni lo habían descuartizado ni dado de comer a los cerdos, como rezaban las coplas de la época. En el prólogo del libro, que sirvió para el guión de la películas, ya se advierte que el caso está dramatizado y es "una aproximación a la verdad".

EL CID

«España es un país para hacer películas porque tiene infraestructura y todo tipo de paisajes. Hay mar, desierto, montañas y, lo más importante, los intérpretes españoles hablan inglés y los técnicos son muy profesionales»,afirmaba Charlton Heston en 1999, cuando participó en la miniserie de Antena 3 'Camino de Santiago'.

Era un entusiasta de nuestro país, donde rodó varios filmes en los años cincuenta y sesenta, en la época de los Estudios Bronston. Entre otros: 'Marco Antonio y Cleopatra', 'Julio César', 'El Cid' y '55 días en Pekín'.

"Esta fotografía a muchos Belmonteños nos trae recuerdos ya lejanos de lo que fue el rodaje de muchas escenas de la película EL CID CAMPEADOR.
Dirigida por Anthony Mann y como personajes artísticos Charlton Hesto y Sofia Loren.
Pues desde el mes de Noviembre del año 1960 empezaron a llegar a la Villa de Belmonte equipos de trabajo para ir levantando andamios que utilizarían para llevar a cabo trabajos de acondicionamiento y decoración con moldes de escayola.
Con esto se llevo a cabo la suplementación de los muros del Castillo reconstruyendo su almenado para dar realce a su figura, y también se acondiciono la muralla que se ve en la película a la cual le faltaba parte de su almenado.
Se hicieron dos tomas importantes del castillo que resaltan bastante bien en la película, una cuando el Castillo es tomado como escenario por la parte de atrás representando la cárcel de Calahorra, esta parte del castillo al estar siempre en la sombra da la impresión de lobrega, que seria en la pelicula las Mazmorras o carcel.
La otra toma es desde la parte de delante que es donde nos da esa magnifica estampa de ser una gran fortaleza medieval, y al pie de esta es donde tuvo lugar el torneo entre el Cid Campeador y el lugar teniente del rey Ramiro de Aragón, disputándose la ciudad de Calahorra.
Este lugar es el antiguo campo de fútbol que fue abierto en la ladera del Castillo, y en donde se jugaron varios campeonatos de Fútbol cuando Belmonte tenia un equipo de bandera y jugaban contra Tresjuncos, las Pedroñeras y Mota del Cuervo.
Tambien fue utilizado para la instrucción del frente de juventudes cuando en el Castillo estuvo instalada la Academia de Onésimo Redondo y venian aquí chavales de toda la provincia de Cuenca, a hacer sus campamentos, y a pasarselo bien, pues ya habia una buena granja de cerdos pollos y conejos.
Esta escena se rodó en primavera y en unos días excelentes de calor abrasante, pues me acuerdo que contrataron a un aguador y su borrico para que constantemente acarrease agua a la gente que estaba en las almenas (extras, gente del pueblo) y que habia varias personas repartiéndola con botijos. Los extras cobraban su salario al terminar el rodaje y entregar la ropa.
Fue un año para el recuerdo porque habia bailes todas las noches y la gente vivia una alegría nunca antes experimentada, todavia recuerdan algunos extras la cantidad que recibian de dinero ya que todas las noches cobraban su sueldo".
(información desde http://www. poetadebelmonte. soy. es)

Mi agradecimiento a los directores, protagonistas y todos los autores de cualquier información aquí mencionada.

LA VIRGEN DE GRACIA Y S.JUAN DEL CASTILLO


A LA VIRGEN DE GRACIA Patrona de Belmonte (Cuenca)
"Un Rum Rum se oye en el cielo
De alegría contenida
La madre de Dios pide vuelo
Para hacer una salida.
Al llegar el mes de Septiembre
Ogaño a igual que antaño
Te espera una muchedumbre
Son tus hijos los de este año.
La alegría se contagia
Es el milagro de "Gracia "
El que no viene siente nostalgia
Rogando a la Virgen una "Gracia"
Belmonte cree en ti Madre
Y apuesta por su economía
Rogándote intercedas al Padre
Que tus hijos tengamos valentía.
El progreso esta en el horizonte
Brindando bienestar al ciudadano
Siendo este el camino de Belmonte
Abriendo todo tu pueblo la mano
Que las campanas volteen
Anunciando diana floreada
Que los ecos en la cañada resuenen
Siendo la Virgen de Gracia alabada".
A.Zafra( poeta belmonteño)

Juan del Castillo nació en Belmonte (Cuenca), de familia noble. Fue el hijo mayor de diez hermanos. Sus padres, Alonso del Castillo, que fue regidor de la villa, y María Rodríguez, fueron un matrimonio distinguido por su honradez y virtud, que ofrecieron a sus hijos, no sólo las riquezas y blasones de su casa, sino el espíritu cristiano, que era el mejor patrimonio de las familias cristianas. Le bautizaron en la excolegiata de S. Bartolomé.


Su partida de bautismo dice: "A 27 de septiembre de 1595, bauticé yo, Pedro Chaves, cura de la Colegial de esta villa, a Juan, hijo de Alfonso del Castillo y de María Rodríguez".Es uno de los tres jesuitas mártires de la región del Río de la Plata. Ellos son Roque González de Santa Cruz, Alfonso Rodríguez y Juan del Castillo.El 20 de octubre de 1558, S. Francisco de Borja había fundado el Colegio que la Compañía de Jesús en Belmonte, donde Juan pudo iniciar sus estudios de humanidades.
Sus padres, después, le enviaron a la Universidad de Alcalá a estudiar "leyes", artes y teología. Al terminar el primer curso, se despidió de los compañeros, anunciándoles que quería ser misionero, al sentir la llamada de Dios.De allí, se trasladó a Madrid, al noviciado de los jesuitas, que había conocido en su pueblo natal, en el que fue admitido el 22 de mayo de 1614, con 18 años. Acabado el noviciado, el 2 de noviembre de 1616 va a Huete (Cuenca) para hacer sus estudios de Filosofía en el Colegio de la Compañía. Por allí, pasó el P. Juan de Viana, Procurador del Paraguay, "ponderando la abundancia de mies, de las almas, de las penalidades y fatigas de los misioneros y del martirio cierto...".

Esto enardeció el corazón de nuestro joven estudiante enamorado de Cristo y de su cruz. El hermano Castillo decide marchar a misiones "porque allí hay fama de mayor pobreza, fatigas y trabajos apostólicos". Su integridad de vida, modestia, piedad y aplicación fueron extraordinarias. Antes de partir, acude a su pueblo, y se despide a los pies de su patrona, Ntra. Sra. de Gracia...En Lisboa, conoce al P. Alfonso Rodríguez de Zamora, desde ese momento "compañero" de misión y martirio...
Por fin llega a Buenos Aires, y de allí, en 1620 es enviado a La Concepción (Chile) donde imparte clase a los jóvenes, a los que deja impresionados por el ejemplo de su vida. Posteriormente irá a Córdoba (Argentina) a terminar sus estudios de filosofía y teología, y para aprender el "guaraní" para poder misionar entre los indios.
El 16 de Diciembre de 1625 es ordenado sacerdote. La víspera se ofrece al Señor con una sencilla oración: "¡Dame fuerzas...!". El 8 de marzo de 1626 escribe una carta a su padre, que se guarda en el archivo parroquial, expresando sus anhelos misioneros y con sabor a despedida: "Dixe mi primera misa ocho días después de la fiesta de la Purísima Concepción de la Virgen Ntra. Sra. ... Luego subiré a las misiones del Paraguay a trabaxar y morir entre aquellos indios de donde daré a vuestra merced, relación larga de cómo me fuere por allá...

Ntro. Sr. ha sido servido de que los superiores me han señalado para las misiones del Paraguay. Saldré de aquí el 13 de junio para esta empresa de pelear con indios gentiles, donde se ofrecerán muchas ocasiones de larga paciencia". Dos años después tiene la ocasión de dedicarse a la conversión de los indios en las célebres "reducciones" del Paraguay y del Uruguay.
Las reducciones eran poblados indígenas en los cuales los jesuitas reunían a los indios para enseñarlos a trabajar establemente, convirtiéndolos al cristianismo y habituándoles a la vida civil.En primer lugar, irá a una "reducción" de los jesuitas de S. Nicolás de Paratiní, poco antes fundada por el P. Roque González, que después moriría mártir con él. El 14 de agosto de 1628 es destinado a Asunción (Paraguay), junto al río Yjuhí, donde él mismo funda una Nueva Reducción, que iba a ser el escenario de su martirio, en la que el 15 de agosto, congregó a 400 indios.
Allí trabajó un cierto tiempo, recogiendo buenos frutos en la conversión y organización social, a pesar de la fiereza de los indígenas. Eran particularmente hostiles a los misioneros y a las reducciones.
Fue uno de ellos, Nezú, el que entró en el poblado, organizado para conseguir sus beneficios. Enseguida, llegó al enfrentamiento en contra de los misioneros, conservando su concubina y procurando reconducir a los indios a la antigua fe de sus mayores.Nezú ordenó en noviembre de 1628 matar a los religiosos y quemar la iglesia.
Primeramente, las víctimas fueron los padres Roque González y Alfonso Rodríguez, uno paraguayo y el otro español, que fueron asesinados el 15 de noviembre.Como dicen las "Actas del Martirio": "El viernes 17 de noviembre de 1628, a las tres de la tarde, mientras estaba rezando vísperas en la puerta de la Capilla, cogido a traición, lo derribaron en tierra, dándole muchas bofetadas... atándole las muñecas lo arrastraron por el bosque tres cuartos de legua, le clavaron flechas, le apedrearon y le golpearon con porras... Mientras, al Padre Castillo se le oía musitar: "Sea por amor de Dios". Y desde las manos de su verdugo, voló a las de su Dios".

En los primeros momentos después del martirio, los mismos indios ya bautizados, cristianos, recogieron los despojos humanos que habían dejado, llevándolos como verdaderas reliquias de los "Santos Mártires". Se recibieron en Candelaria con extraña fiesta y regocijo de danzas y repique de campanas y otras muestras de alegría y júbilo.
Hubo misa solemne y sermón, refiriendo algunas de las muchas virtudes de los Santos Mártires, esperando de Nuestro Señor que los ha empezado a honrar en esta tierra del Paraguay, los glorifique en adelante por toda la Iglesia Universal.La película de "La Misión" nos presenta maravillosamente la vida y el martirio de los jesuitas en las reducciones.
Fue beatificado por el Papa Pío XI, el 28 de enero de 1934, y canonizado por el Papa Juan Pablo II en Asunción (Paraguay), el 16 de mayo de 1988.

Información desde . http://www.santopedia.com/

SUS MONUMENTOS


"tan bella, tan magnifica, tan robusta en su armazón y tan marcial en su apostura"
"sea cercada e rodeada en derredor con una cerca de cal e canto"
"las murallas tendrán treinta y cinco pies de alto por ocho de ancho, sin contar con los parapetos y almenas que han de coronarlo (año 1465)
El castillo de Belmonte se eleva en el cerro de San Cristobal, a las afueras de la localidad de Belmonte, al suroeste de la provincia de Cuenca, distando bastante de su capital, y no muy alejada de la línea fronteriza con la provincia vecina de Toledo.
El origen del castillo de Belmonte data del siglo XII, aunque el castillo actual data del siglo XV, iniciándose su construcción comenzó en 1456. Con la guerra por el trono, será plaza dominada por Felipe V el Animoso. En el siglo XIX perteneció a la familia de Montijo y concretamente a doña Eugenia de Montijo, que se convirtió en emperatriz de Francia por su boda con el emperador Napoleón III. Esta etapa dejó su impronta en la fortaleza, pues la condesa mandó realizar una serie de reformas, con un claro matiz francés.
En el año 1936, durante la Guerra Civil, se convertiría en cuartel y cárcel. Aquí se inició su destrucción.
El material utilizado para esta impresionante obra constructiva es la piedra. Se trabaja con sillarejo, es decir, con piedra rusticamente labrada. En el interior nos encontramos con la utilización de madera para la realización de sus techos que se extiende por varias dependencias.

El recinto tiene una planta atípica: dos estructuras rectangulares con torres en sus ángulos exteriores y una tercera estructura cuadrangular (la torre del Homenaje) con otras dos torres a los lados, que conforman el patio de armas en el interior de la composición, toda ella rodeada por una muralla. La puerta de entrada al edificio está enmarcada por dos torres cilíndricas, y toda la estructura está rematada con almenas y matacanes.La torre del Homenaje se encuentra desmochada. El resto remata en una cornisa con matacanes. Aparecen algunos vanos o saeteras, pero en general no proliferan mucho a lo largo del edificio.

Cabe destacar la muralla en forma zig-zag, sorteando los ángulos que le impidan mayor visibilidad.

También destacan las techumbres de estilo mudéjar y las yeserías con proliferación de elementos góticos decorando las escasas ventanas, de las que dispone el edificio. El escudo de los Pacheco es otro de los elementos dignos de mención.


Iglesia Colegial de San Bartolomé

Se construyó sobre la antigua parroquia visigótica del siglo V. A instancias del I Marqués de Villena, D. Juan Pacheco. Fue instituida como colegiata por el Papa Pío II en 1.459, según la Bula del Concilio de Basilea en 1.436.
Esto supone que existe un Cabildo, presidido por un Prior, llegando a 32 entre canónigos y prebendados que lo componían. De planta de tres naves amplias y de severa magnificencia, con cuatro tramos que separan gruesos pilares redondos, soportando arcos apuntados y bóvedas de crucería. La piedad y devoción de las familias nobles de Belmonte, fue agregando capillas en las naves laterales, dotándolas de altares, rejas, imágenes, etc.

En esta joya incomparable de estilo gótico, se puso en juego el sentido religioso y cristiano de un pueblo en una maravillosa sinfonía de cinceles y martillos, gubias y bujardas, pinceles y paletas, agujas y sedas, que empiezan en el S. XV y terminan después del S. XVIII, y así salió ella, esbelta, grandiosa, sublime, imponente, "para que (según la Bula del Concilio de Basilea de 1436), sea digna de la Gloria a Dios y del Bienaventurado San Bartolomé Apóstol a quien está dedicada".
La puerta del Sol, orientada al medio día está flanqueada por dos pináculos góticos, el hueco de la puerta es un arco rebajado e inscrito dentro de otro trilobulado del gótico florido. El tímpano fue transformado en el S. XVI adosando elementos platerescos en su decoración. Entre los escudos heráldicos de los Marqueses de Villena se abrió un ventanal en forma de óvulo en 1614.

La puerta de los Perdones, es la de poniente, en la que dos arcos germinados y rebajados se cobijan bajo otro ligeramente apuntado, en cuyo tímpano y sobre el parteluz, aparece la figura de San Bartolomé, queriendo otorgar el perdón a los penitentes en los días penitenciales de la antigua disciplina.

De las estancias más destacables de la Colegiata, está el Coro, (de Egas Cueman y Hanequín de Bruselas en 1454), la Capilla de la Anunciación, (capilla de la familia de Fray Luis de León), Capilla de S. Pedro y S. Pablo, Capilla Mayor, Capilla de Santiago o la Capilla de Bautismo.


Todo esto realizado por los mejores artesanos de la época. Por ejemplo, arquitectos tan importantes como Juan de Homa, los hermanos Eguas Cueman y Hanequín de Bruselas, Esteban Jamete, Francisco de Luna o Andrés de Valdelvira.
La gran maestría de artesanos, en retablos como Diego de Tiedra, o Juan de Borgoña. Pintores tan reconocidos como Bartolomé Matarana, Luis Morales "El Divino", García Salmerón o Alonso Cano. Rejeros como Hernando de Arenas, Juan Francés o Esteban Lemosín. Todos estos importantes artesanos y artistas trabajaron en la ejecución de la Colegiata, desplegando su gran maestría e imaginación.

La Colegiata de Belmonte es Monumento Nacional desde el 27 de Julio de 1.943
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